Unos días antes de Navidad fui a pasear por el barrio de La Ribera de Barcelona con el único fin de ir a comprar frutos secos a Casa Gispert.
Quizá muchos de los que vivis en Barcelona ya la conoceis y a los que no, os animo a que os paseis por allí y, por supuesto, a los que vengais de visita. Está al lado de Santa Maria del Mar por lo que el entorno es fantástico para dar un agradable paseo. Cuando te vas acercando a la entrada ya notas el ároma en el aire que, no sé porqué, me recuerda mi infancia.
El interior te transporta a otra época y cuando comienzo a mirar los productos que tienen.... tengo que ponerme freno porqué me los llevaria todos! Compré unas nueces del país que estaban de vicio, unas pasas de corinto que tenían que ser para unas galletas y la mitad han ido a parar a ensaladas o nos lo hemos comido tal cual, al igual que los pistachos, avellanas, orejones y almendras. En fin, que ya tengo excusa para volver.
Este es el horno de leña que cuando llegué estaban cargando.
Es una zona que me encanta y entre hará unos meses de casualidad!
ResponderEliminarMe encantó!!
Besitos
Ivana: A mí esa zona me tiene el corazón robado.
ResponderEliminarBesos.
Una entrada muy guapa Pili, estas hecha una profesional.
ResponderEliminarUn beso,
Anna
Nos encanta esta entrada porque nos encanta la tienda, los aromas, los tuestes, el surtido inacabalble..., el resabio, a parte del barrio por el que nos encanta pasear e ir descubriendo interesantes propuestas gastronómicas.
ResponderEliminarUn abrazo
Anna: Gràcies, em faràs possar vermella... El proper dia que anem a casa teva ens hi passem!
ResponderEliminarPetons.
La Quinta: Estoy completamente de acuerdo. Una descripción impecable.
Besos.